viernes, 23 de febrero de 2007

De Visita a mi Darkside

Hoy la ira se apoderó de mi. No tuve opción de canalizarla, no podía frenarla, iba destrozando cada valla que le ponía para que no siga creciendo....perdí el control, me desconocí.

Poco a poco sentía como me iba encendiendo, sentía fuego en mi estómago, en mi cabeza, en mis ojos, en mis puños, en mi corazón, en mi alma...me consumía y no podía detenerme.

Luego todo ese fuego alcanzó algo que permitió la combustión... exploté!!!

Grité fuerte, gritos largos, pausados solamente por pequeños lapsos para tomar aire y continuar...

Golpeé fuerte, golpeé paredes, puertas y todo lo que pude... como si estuviese defendiendo mi vida contra seres invisibles...seres perversos que habitan en mi mente y merodean mi alma, esperando mi descuido para llevarme al lado más oscuro que nadie pueda imaginar.

Luego llegó el cansancio, la desesperación, la tristeza y el arrepentimiento por el daño que yo mismo me provoqué al agitar y darle poder a mis demonios internos....demonios que creía exterminados.

La mente se comenzó a enfriar y a funcionar....llegó la recapacitación, el análisis, la autocrítica, la magna energía....una sensación de alivio. Todo era claro, brillante, fresco.

Una hora de vida desperdiciada, una hora de retroceso, una hora de estupidez...una hora de visita a mi darkside

1 comentario:

Acidbjazz dijo...

Recomiendo para estos casos mejor perderse en un embotellamiento..XD